Suena raro, pero he sido seducida por unas maletas infantiles.
Y en mi es raro, porque yo soy de las de la compra racional, de comparar, valorar, buscar y volver a buscar, sopesar pros y contras…
Pero también soy humana, y eso significa que cuando se pone ante mi vista algo sencillamente preciosérrimo, no lo puedo evitar, me enamoro locamente.
Mi último objeto de deseo son las maletas infantiles See Ya, de la marca Olli Ella. Confieso que no conocía la marca, pero le pongo remedio desde ya, porque tiene un millón de cosas bonitas, como estos preciosos carritos de mimbre.
Volviendo a las maletas. Me han generado un problemón.
Veréis, mis hijas tienen dos chulísimas maletas Trunki, que hasta la fecha eran lo más de lo más y no tenían rival digno en el mundillo de las maletas infantiles. Las tienen desde hace más de tres años, les encantan y las usan cada fin de semana cuando vamos al pueblo para ver a los abuelos, y ahí siguen, intactas, porque las Trunki son buenas-buenas.
Pero ahora se han cruzado en mi camino las maletas See Ya y me parecen lo más bonito del mundo mundial, no lo puedo evitar. Así que estoy resistiendo con todas mis fuerzas para no caer presa de la compra compulsiva y pedir dos de estas preciosidades right now. En rosa y mostaza, para más datos…
Afortunadamente, a la gente de mi generación nos educaron en aquello de «si funciona no hay motivo para cambiarlo», porque si no… habría pecado en el mismo instante en que las vi.
Me fascina su diseño estilo vintage y la elección de los colores es sencillamente perfecta: rosa, mostaza, mint y terracota. Mezclado con el blanco del asa y las correas, resulta tan tierno, tiene un rollito tan chic y tan vintage a la vez…
Las maletas See Ya son de esas cosas que no te importa ver colocadas en mitad de la habitación. Y es que, estaréis conmigo en que son un objeto de decoración en si mismas.
Son tan chulas que no dudo que los peques las utilizarán también para guardar sus juguetes y sus tesoros más preciados.
Ains, qué cosa más bonita. Irreconocible estoy, así que mejor os cuento los detalles prácticos y os doy el argumento de compra racional y lógico, para que no os sintáis mal si no sois capaces de resistir la tentación como yo…
Estas estilosas minimaletas están diseñadas para peques de 2 a 6 años aproximadamente, y son perfectas para llevar su ropita en viajes de fin de semana (seamos realistas, su tamaño no da para más), o sus juguetes y cosas favoritas en viajes más largos.
Miden 40cm de altura (con asa 67cm) x 26cm de ancho y tiene una profundidad de 17 cm.
Lo que más me gusta es que están diseñadas para que puedan llevarla los peques cómodamente, gracias a las ruedecitas y el asa retráctil que incorporan, como las maletas de los adultos o las mochilas del cole con ruedas.
Su interior está lleno de detalles prácticos como el tejido de rejilla con cremallera y las cómodas bandas elásticas para sujetar la ropa.
Están fabricadas en poliéster, plástico, latón y piel vegana (es la primera vez que escuho lo de piel vegana, lo confieso, pero he investigado un poco y me parece un puntazo).
Hace unos meses pedí, rogué, supliqué a Lycka, la más «pecaminosa» de las tiendas Little, los expertos en crear necesidades, que las trajeran, y como son así de majetes, se lo han currado y…¡voilá!, ya las tienen luciendo orgullosas en su tienda física de la calle Puentezuelas en Granada y en su tienda on line, para puedas comprarlas con toda comodidad a golpe de click.
Y ya está. Eso es todo lo que tenía que decir sobre las maletas infantiles See Ya.
Prometo volver a ser la mujer racional que decide sus compras con toda lógica…., o no 😉
