Hacer una ruta de senderismo en Alhama de Granada con niños es sólo una de las muchísimas opciones que este bellísimo municipio ofrece a las familias.
En Somoslittle nos declaramos unos auténticos «Alhama-lovers», y por eso volvemos siempre que podemos para descubrir cada día un poquito más sobre Alhama y su entorno.
Hace un par de años lo pasamos en grande aprendiendo muchísimo sobre la Alhama más monumental gracias a la visita guiada «Alhama en familia» que ofrece la Oficina de turismo (podéis contactar en este tlf. 958 360 686. para informaros sobre la ruta) .
En esta ocasión el cuerpo nos pedía ruta, así que apostamos por hacer uno de los senderos más recorridos tanto por los jameños/as como por los visitantes, el conocido como «Camino de los Ángeles», que nos garantizaba un perfecto «combo» de naturaleza, historia, diversión y gastronomía.
Tabla de contenidos
- 1 Los Tajos de Alhama, Monumento Natural
- 2 Los Tajos de Alhama, Bien de Interés Cultural
- 3 Los Tajos de Alhama por el Camino de los Ángeles
- 4 Área Recreativa El Motor
- 5 Pantaneta de Alhama
- 6 Nuestra experiencia en vídeo
Los Tajos de Alhama, Monumento Natural
Desde 2011, los Tajos de Alhama tienen la consideración de Monumento Natural.
Como la mayoría sabréis, «Monumento Natural » es el término empleado para definir una figura de protección de «aquellos espacios y elementos que ya gozan del reconocimiento y aprecio de la población por los valores naturales singulares que presentan».
Existen diferentes tipos de monumentos naturales, de carácter geológico, de carácter biótico, geográfico, ecocultural y Mixto.
El Monumento Natural de Los Tajos de Alhama pertenece a esta última categoría, y está definido como Mixto. Este tipo de Moumentos Naturales define a aquellos espacios o elementos cuya singularidad, valor social, reconocimiento o interés predominante provenga de compartir dos o más características de las tipologías anteriores.
La actividad erosiva del río Alhama a lo largo de los años sobre un terreno dominado por las calcarenitas bioclásticas y los conglomerados del mioceno, han conformado un espectacular paisaje formado por un conjunto de cañones y tajos de singular belleza.
Los Tajos de Alhama, Bien de Interés Cultural
Como podéis ver, a Los Tajos de Alhama no les faltan «medallas» y cuentan además con otra figura de protección, ya que fueron catalogados también como BIC (Bien de Interés Cultural) en 2011, sumándose así a otras zonas del pueblo con dicha catalogación, como los Baños Árabes y los Barrios Alto y de la Joya.
Esta figura de protección es la máxima distinción a nivel nacional que se otorga a un Bien que, por su relevancia social e histórica y su singularidad, necesita y merece ser protegido.
Los Tajos de Alhama por el Camino de los Ángeles
Existen diferentes opciones para disfrutar de Los Tajos de Alhama haciendo senderismo.
Nosotros hemos optado por la ruta más sencilla y corta, conocida como el Camino de los Ángeles.
Se trata de un breve recorrido que nos lleva durante todo el camino a acompañar al río por el fondo de las imponentes paredes verticales de los tajos, deleitándonos con su murmullo y envolviéndonos en un perfecto ecosistema de ribera.
A día de hoy, este camino que era transitado por agricultores/as y paisanos de la zona, ha pasado a convertirse en uno de los espacios naturales de referencia de nuestra provincia y es visitado a diario por senderistas y por supuesto por científicos y amantes de la naturaleza en general.
¿Para quién es la ruta de los Tajos de Alhama? Duración, dificultad y distancia
De dificultad baja, es muy accesible y resulta perfecta para realizar con peques de cualquier edad, ya que no entraña riesgos.
Se trata de una ruta lineal, es decir, que recorre el mismo camino de ida y vuelta, y que puede iniciarse en el casco urbano del pueblo o bien en la Pantaneta, para en ambos casos regresar al punto de partida.
Nosotros hemos grabado dos «versiones» de la ruta: una que llega hasta el Área Recreativa El Motor y otra que no lo incluye. Según vuestros planes podréis optar por una u otra, pero yo no puedo dejar de recomendaros hacer una parada en el Área Recreativa.
Bonita, bien equipada… ¡y con tirolina para los peques!, lo difícil será «sacarlos» de allí…
La primera opción (llegando al Área recreativa) supone algo menos de 4 km (y otros tantos de vuelta), que pueden recorrerse, a ritmo súper tranquilo, parando para hacer fotos etc., en una hora aproximadamente. ¡Apta para todo el mundo!
La segunda opción, desde La Pantaneta hasta el casco urbano de Alhama, es un poco más corta: apenas 2,5 Km que fácilmente se hacen en media horita.
Nosotros hicimos un «combinado» de ambas opciones: partimos del casco urbano de Alhama para llegar al Área Recreativa y después a La Pantaneta, para después regresar desde ahí (no sin antes disfrutar de la gastronomía local en uno de los restaurantes de la zona).
Inicio de la ruta
Antes de comenzar la ruta, y para asegurarnos de que elegíamos el mejor camino para nuestros planes ese día, hicimos una parada en la Oficina de Turismo de Alhama, donde amablemente nos indicaron el camino, nos facilitaron un completo mapa y nos hablaron de todas las opciones que teníamos para completar nuestra visita al pueblo ese día.
Comenzamos aquí nuestra ruta y nos dirigimos al famosísimo mirador cercano, donde nos «ponemos en situación» gracias al cartel informativo situado al inicio, que detalla el carácter de conector con el Parque Natural de la Sierra de Alhama, Tejada y Almijara que la ruta tiene.
Descendiendo por la cuesta, hacemos un primer alto en el camino para disfrutar de algunas de las edificaciones más emblemáticas del pueblo, los antiguos molinos que nos hablan de su pasado industrial. ¡Hasta 22 molinos llegó a albergar Alhama!
Vestigios del pasado industrial de Alhama: Los Molinos
En el recorrido encontramos restos de cinco molinos harineros, que nos hablan del importante pasado de esta industria en Alhama: Santa Teresa, San Pedro, San Francisco, Nuestra Señora del Carmen y La Purísima (restaurada y actualmente visitable).
A finales de los años 60 del siglo pasado, y debido a razones económicas y a los cambios en los hábitos de consumo de la población, se produjo un gran declive de estas fábricas, que culminó con su desaparición definitiva.
Ubicadas en esta zona por su proximidad al río, las fábricas utilizaban la fuerza del agua para su funcionamiento, gracias a la creación de una presa y de un canal de conducción con un complejo sistema de compuertas, que encauzaba el agua hacia ellas.
La Fábrica de Harinas La Purísima
La Fábrica de Harinas La Purísima está rehabilitada y actualmente se ha convertido en un Museo que puede ser visitado.
Nosotros no lo teníamos previsto, así que llegamos demasiado tarde para la visita, pero desde luego eso nos da la excusa perfecta para volver ¡una vez más! a Alhama.
En el interior se puede ver la maquinaria original de mediados del siglo pasado en perfecto estado, salas de interpretación y exposiciones… pero sobre todo, os recomiendo disfrutar del lujo de conocer la historia de la mano de los/as excelentes profesionales de la Oficina de Turismo de Alhama, donde se puede reservar la visita directamente llamando al 958360686.
Retrocedemos un poco para volver a subir hasta un panel informativo que describe el entorno y donde realmente comienza nuestra pequeña aventura por el Camino de los Ángeles.
Geología de la zona
Hacer una inmersión en estos desfiladeros es un auténtico lujo, y una oportunidad de oro para que nuestros peques aprendan algo sobre geología en un espectacular manual al aire libre.
Yo no soy geóloga, así que pido de antemano disculpas si hay alguna incorrección en lo que os cuento, pero en mi defensa, diré que cuento con el comodín de mi marido, que sí que es geólogo, y que disfrutó ayudándonos a mirar con ojos diferentes el camino que recorríamos.
Eso sí, yo voy a intentar traducir lo que nos contaba a «humano», tratando de simplificar sin vulgarizar.
Y para hacerlo más llevadero, os propongo una primera actividad práctica: prestad atención a las paredes de los tajos… estamos ante testigos del tiempo que nos hablan de que hace unos 9 millones de años, la zona estaba bajo el mar…
Las rocas que forman estas paredes verticales se denominan calcarenitas, que más técnicamente hablando son rocas que se han formado por la consolidación de arenas calcáreas.
Impresas en ellas hay muchas señales que, a ojos de geólogos, son fáciles de interpretar. Hablamos sobre todo de fósiles que nos dan la evidencia de que la zona estuvo bajo el mar.
Estas paredes son realmente insólitas por la cantidad de depósitos de ese mar que las cubrió y que conservan a día de hoy. Un estudio en profundidad de la zona, nos mostraría cómo ese mar fue ganando en profundidad, tenía zonas de olas, corrientes marinas e incluso un estuario.
Todo el cañón está excavado por la naturaleza en calizas bioclásticas.
Las calizas bioclásticas son básicamente calizas que están formadas en su mayoría por trozos carbonatados de fósiles.
Se entiende mejor si os digo que la palabreja “bioclastia” es la meteorización física y química que hacen los seres vivos en la roca.
Seguro que con una imagen lo entendéis mucho mejor. Aquí abajo podéis ver restos de poliquetos, antiquísimos gusanos marinos… Fascinante ¿verdad?
Ermitas y leyendas del Camino de los Ángeles
La ruta de senderismo de los Tajos de Alhama por el Camino de los Ángeles es corta en kilómetros ¡pero increíblemente rica en historias y leyendas!
Ermita de la Peña de Francia
Conforme avanzamos, encontraremos en el camino una casa cueva y un poquito más adelante con las ruinas de la Ermita de la Peña de Francia.
La historia de esta ermita está directamente relacionada con la historia de los molineros del lugar ya que es la patrona de su gremio.
Cuenta la leyenda que las plegarias de una madre a la Virgen de la Peña salvaron la vida de su hijo, que había caído en un cubo de molino y del cual salió intacto, además de ofrecer curaciones y milagros.
Ermita de los Ángeles
Siguiendo el camino, encontramos la famosísima Ermita de los Ángeles, de pequeño tamaño y excavada en la roca, que protagoniza la más conocida de las leyendas de la zona.
Cuenta la historia (que ha pasado de generación en generación) que un 2 de Agosto de 1500 un noble caballero de Málaga venía por este sendero en su corcel, cuando algún reptil u otro animalillo se cruzó en su camino, asustando al caballo y provocando que el jinete cayera por el tajo. Imaginad la caída…
El caballero, mientras caía, y veía su muerte segura, pidió a la virgen morir como un cristiano.
Parece ser que la virgen escuchó su lamento y, mientras su caballo se hacía trizas contra las rocas, el jinete cayó a unos metros de distancia y se salvó la vida (por el momento). El caballero al despertar, vio a la virgen, la cual le dio unos días de vida para poner en orden sus asuntos como un buen cristiano y le pidió que construyese un altar en ese lugar.
El noble, que era adinerado, cumplió su promesa e hizo que se construyera la ermita, muriendo poco después tal y como había deseado.
En el lugar de la caída se colocó una cruz, y es conocido ahora como «Salto del caballo».
Por cierto, que no son pocos los senderistas que pasan y se quedan asombrados al ver en una de las rocas las marcas de las herraduras del caballo… ¡ya me contaréis si vosotros también las descubrís!
Vegetación y fauna
A lo largo de toda la ruta nos acompañará una clásica vegetación de ribera, que por ejemplo en otoño da unos preciosos colores a la zona.
También encontraremos a lo largo del recorrido vegetación más seca, como retamas, mejoranas , romeros…y una de las especies más características de la zona, la llamada “zapatitos de la virgen”, que crece como un cojín o almohadilla de color verde y rosado en las paredes de los tajos.
Nosotros hicimos la ruta en invierno, pero me anoto realizarla también en primavera, ya que en esta época el borde los tajos suele llenarse de lirios… ¡y tiene que ser un auténtico espectáculo!
En cuanto a fauna, encontramos reptiles como culebras, lagartijas y lagartos…
Y por lo que respecta a las aves… ¡hay de muchos tipos!
El río permite que vivan allí muchos insectos, por lo que son habituales las aves insectívoras que se alimentan de ellos como verderones, jilgueros o verdecillos.
Los roquedos son además un buen soporte para construir nidos por lo que, con un poco de paciencia, podemos observar también aves como búhos reales, cernícalos…
Otros animanillos habituales de la zona son los topillos, ratoncillos de campo, fáciles de encontrar en la ribera del río.
Desde luego la lista podría ser inmensa ya os digo, y si el tema os gusta de verdad, siempre es una buena idea tirar en la ruta de alguna guía de flora, fauna y vegetación.
Os dejo aquí una idea para animar a los peques (y no tan peques) a investigar un poco más sobre la fauna local, prestando más atención al camino, aprendiendo y disfrutándolo de una manera mucho más completa.
Se trata de una actividad en la que vamos a buscar huellas de animales e intentar descubrir de qué animal se trata. os dejo toda la info en este post.
Área Recreativa El Motor
Tenía muchísimas ganas de visitar este área recreativa de la que me había hablado hace tiempo ¡y no defraudó!
Puede ser punto de llegada de la ruta, y hacer allí el descanso para la comida, o bien punto de partida donde dejemos nuestro coche para hacer el ascenso en sentido inverso hasta el pueblo.
Perfectamente acondicionada con mesas y zonas de barbacoa (ya sabéis, únicamente en temporada en que está permitido utilizarlas), el acceso atravesando una preciosa arboleda, es de cuento. Además, si os fijáis, podréis ver en alguno de los troncos los agujeros para el nido hechos por pájaros carpinteros.
El auténtico punto fuerte del Área Recreativa El Motor (al menos para los peques) es su estupenda tirolina.
Tuve que ponerme muy seria para conseguir sacar a las niñas de allí…
De tamaño perfecto, es tan divertida como segura y merece por sí misma la parada en el área recreativa.
Pantaneta de Alhama
Muy cerca del Área Recreativa El Motor se encuentra la Pantaneta de Alhama, un humedal de extraordinario valor ambiental que es un claro ejemplo de conquista de la naturaleza de un espacio creado artificialmente.
Incluida en el Inventario Andaluz de Humedales desde 2010, pertenece a este catálogo del que forman parte espacios «que constituyan el hábitat de comunidades biológicas de interés especial, o bien aquellos que posean características geomorfológicas o culturales de gran valor debido a su rareza o nivel de representatividad».
Es posible recorrer la ribera de la Pantaneta gracias al sendero circular que la recorre y que puede iniciarse en la zona de aparcamientos que hay justo enfrente de uno de los establecimientos de hostelería de la zona.
En ese mismo lugar, encontramos un estupendo puesto de observación de aves desde el que, con un poco de paciencia, podremos avistar multitud de especies diferentes, como las fochas, el porrón europeo o porrón moñudo, éste último amenazado de extinción.
La pantaneta es hogar de aves durante todo el año así como de aves de paso en época de migración.
Si no somos expertos/as ornitólogos, podemos guiarnos por los diferentes carteles que encontramos a lo largo del sendero sobre la fauna y flora que habita este ecosistema.
Nuestra experiencia en vídeo
Para terminar te convierte a hacer esta ruta (aunque a estas alturas no crea que sea necesario…) te invito a dedicarle unos segundos a un pequeño vídeo en el que hemos resumido nuestra experiencia.
Tan cortito como un Reel de Instagram
Hasta aquí nuestra experiencia en Alhama recorriendo la Ruta de los Tajos por el Camino de los Ángeles.
Como veis, se trata de una ruta rica en valores ambientales, históricos, culturales… Una ruta breve pero llena de atractivos y realmente idónea para disfrutar en familia.
¡Nos vemos en Alhama!
