¿Quién no ha visitado Alhama de Granada?
Probablemente todo el mundo sabe de sus espectaculares Tajos, su famosísimo Balneario, su espléndido patrimonio histórico… Pero es muy posible que no os hayáis planteado hacer turismo familiar en este pueblo de singular belleza.
Hoy os damos varios motivos para que no dudéis un instante el próximo fin de semana libre que tengáis para coger el coche y daros una vuelta por Alhama con vuestro peques.
¿Su principal atractivo? El nuevo programa Descubre Alhama en Familia que acaban de poner en marcha y que tuvimos el lujo de ser los primeros en disfrutar.
¡Bravo Alhama por pensar en las familias e incluir sus necesidades e intereses entre vuestra oferta turística!
Sin lugar a dudas un ejemplo y un referente necesario en una provincia que tiene mucho que ofrecer en cuanto a turismo familiar.
Tabla de contenidos
¿Cómo llegar a Alhama de Granada?
Facilito: la manera más sencilla es ir en coche, a través de la A92 dirección Málaga, para después tomar el desvío hacia Alhama por la A402. Ojito con el tramo de carretera comarcal, que no es malo, pero incluye curvas y sobre todo un par de pasos estrechos (de esos en los que únicamente puede pasar un vehículo cada vez), eso si, perfectamente señalizados.
¿Tiempo en llegar desde la capital? , apenas 50 minutos. Perfecto para un viaje de ida y vuelta en el día, aunque pernoctar en la zona y dedicarle al menos un par de días está mucho más que justificado.
¿Por qué Alhama de Granada es perfecta para hacer turismo familiar?
Granada es infinita y ofrece mil y una opciones para realizar turismo familiar.
Sin embargo, por el momento son pocos los municipios que están apostando decididamente por este tipo de turismo dirigido a familias, diseñando una oferta específica y adecuada para ellas.
Alhama de Granada es uno de los primeros pueblos valientes que se ha lanzado a hacerlo.
Tras nuestra experiencia de turismo familiar en Alhama, que hoy os cuento con detalle, lo único que puedo decir es ¡Bravo!
Amamos a las ciudades y sobre todo a los pueblos que buscan convertirse en lugares más amables para las familias, que piensan en sus necesidades e intereses y los tienen en cuenta a la hora de desarrollar sus políticas públicas, entre ellas las centradas en turismo.
Desde mi punto de vista, invertir en propuestas dirigidas a turismo familiar significa mucho más que orientarse a mejorar las cifras de visitantes de un municipio, un monumento, un recurso natural…es invertir en futuro y apostar por un tipo de turismo sostenible e inclusivo, que se esfuerza por no dejar a nadie fuera y que aprovecha las visitas no sólo para mejorar las cifras económicas del turismo en una localidad, sino también las cifras «sociales».
Porque está muy claro que las cifras «sociales» del turismo en un territorio se mejoran al promover valores directamente relacionados con la educación, el respeto por el patrimonio histórico, cultural y natural etc. entre las generaciones más jóvenes, y sus resultados tendrán a buen seguro un impacto a largo plazo.
Bravo Alhama de Granada, necesitamos referentes como el vuestro en nuestra provincia.
Descubrir Alhama en familia
El patrimonio histórico de Alhama de Granada es realmente espectacular: la antigua cárcel, el Hospital de la reina, la Casa de la Inquisición, el Castillo, el Caño Wamba…
Conseguir que una familia con niños y niñas de diferentes edades lo visite y conozca en profundidad…es otra historia.
Generalmente las explicaciones que se realizan en una de las espléndidas visitas guiadas que ofrece el Ayuntamiento están dirigidas a personas adultas, y para los peques pueden resultar poco atractivas.
¿La solución original que nos ofrecen desde la Oficina de Turismo de Alhama para grupos en los que hay adultos y peques? El fantástico proyecto «Descubre el Patrimonio de Alhama en familia?
Visita guiada: Descubre el Patrimonio de Alhama en Familia
Se trata de una visita guiada por el casco histórico de Alhama que nos lleva a recorrer sus monumentos y lugares más emblemáticos…¡con una gymhana!
Una extraordinaria guía turística propone a las familias participantes todo un reto: en cada lugar que visitemos, habrá que resolver pistas y acertijos para conseguir un tesoro…
El nivel de dificultad se adapta a las edades de los peques, que si lo necesitan pueden contar siempre con la ayuda de los adultos.
De esta forma, vamos recorriendo cada uno de los lugares destacados del casco histórico de Alhama en una visita en la que el tiempo sencillamente ¡vuela! En ningún momento los peques muestran síntomas de fatiga o aburrimiento. Muy al contrario, la motivación es altísima y la capacidad de adaptar el discurso y las explicaciones históricas sobre cada espacio, unidas a la introducción del juego, obran la magia: la información no es recibida sin más, sino procesada y «fijada» tanto en adultos como en pequeños, ya que se une a una experiencia que obliga a pensar y reflexionar.
Os dejamos aquí un vídeo con nuestra experiencia.
Además, a todos los participantes se les hace entrega de material con información extensa sobre el municipio, en el que no faltan detalles pensados por y para los peques, que incluyen fichas para colorear, una cajita de lápices…¡y la dulce recompensa del tesoro que descubrimos al final!
Para mi es un 10 como propuesta de turismo familiar y no puedo sino recomendarla una y otra vez para todas las familias que deseen pasar un día repleto de historia, cultura y diversión.
¿Cómo realizar la visita guiada Alhama en familia?
La visita guiada Alhama en familia se puede realizar el primer y último domingo de cada mes y para poder hacerla es necesario contactar previamente con la Oficina de Turismo de Alhama en el teléfono 958360686.
El grupo mínimo de personas para hacerla es de 10, lo que no significa que tengáis que ser un grupo de 10 necesariamente, ya que puede haber otras familias que también lo estén solicitando para la fecha que os interesa y se llegue sin problemas al número mínimo de participantes.
¿Cuánto cuesta la visita Alhama en familia?
El precio de la visita es absolutamente simbólico: los adultos pagan 3€ y es completamente gratuita para los menores de 12 años.
Disfrutar de la naturaleza en familia en Alhama de Granada
El tema de Alhama y la naturaleza merece un post propio por derecho, ya que son muchas las propuestas, parajes y actividades que podemos realizar en su entorno.
Hoy nos centraremos únicamente en la ruta que nosotros elegimos para completar el día tras la actividad Alhama en familia: la ruta a pie hasta la Pantaneta por el conocido como Camino de los Ángeles.
Se trata de una ruta apta para todas las edades y de dificultad baja, que en apenas unos 40 minutos nos llevará hasta el humedal conocido como la Pantaneta, donde podemos comer, bien en el área recreativa próxima o bien en alguno de los establecimientos de hostelería cercanos. Hay un tramo de descenso (que no resulta excesivamente penoso al ascenso en el regreso) y después todo el camino transcurre llaneando.
En este antiguo camino medieval encontramos antiguos molinos, acequias, la Ermita de la Virgen de los Ángeles y nos adentramos en la espléndida vegetación de un ecosistema de ribera
También puede llegarse en coche en apenas 10 minutos, pero la ruta es tan sencilla y atractiva que merece la pena realizarla caminando (a nos ser que llevéis niños y niñas muy pequeños en el grupo y caminar no sea una opción).
En este último caso, no dejéis de disfrutar de espectacular paisaje de los Tajos junto a la Iglesia de la Encarnación, declarados Monumento natural desde 2011.
Los Tajos se forman gracias a la erosión del río Alhama y son una maravilla geológica que fascina en cualquier época del año.
Una vez llegados a la Pantaneta, es imprescindible dedicar un tiempo a la observación de las numerosas especies de aves (fochas, ánade azulón, porrón pardo, cormorán…) que habitan (en diferentes épocas del año) en el que es uno de los humedales más importantes de la provincia de Granada.
En el camino que bordea la Pantaneta existen diversos miradores ornitológicos que facilitan la observación e incluyen información sobre las diversas especies de aves de la zona.
La Pantaneta es un embalse artificial que la naturaleza ha “tomado” por derecho propio, configurando un espacio cargado atractivos y estímulos para trabajar valores ambientales con los peques.
Para comer en la zona hay dos opciones: bocata al aire libre en el área recreativa El Motor (con mesas de picnic, tobogán, tirolina y columpios) o bien uno de los establecimientos de hostelería de la zona.
La elección depende en buena medida del tiempo y la época del año, así como de las ganas que tengáis de conocer un poco mejor la gastronomía de la zona.
Nosotros realizamos la ruta en otoño y somos de natural “gastroinquieto”, así que no pudimos resistirnos a reservar en uno de los restaurantes más conocidos de la zona, El Ventorro.
Nos animaron las excelentes referencias y sobre todo la posibilidad de conocer a productores locales del excelente y multipremiado queso alhameño (Quesería Cortijo el Aserradero) y de repostería tradicional.
Llevarse a casa algo de la gastronomía de la zona cuando se visita Alhama es casi una obligación y la charla con los productores un placer. Además, nos informaron de que frecuentemente participan en ferias y muestras en la capital, por lo que no vamos a perder su pista para ir reponiendo en nuestra despensa las delicias que compramos.
Eso si, aviso importantísimo: si decidís comer en El Ventorro o en cualquier de los otros establecimientos de la zona como El Pato loco, la reserva es obligatoria…o te la juegas. La zona está muy transitada en fines de semana y festivos y la demanda es altísima, así que reservar con antelación es la mejor manera de tener que esperar demasiado.
La comida en El Ventorro resultó estupenda, y la atención de primera. No faltan platos tradicionales de la gastronomía local, como la típica olla jameña, pero hay opciones para todos los gustos y todos los bolsillos.
Mención especial merece la ginebra local que se elabora en la zona, Ginevia, un producto 100% granadino elaborado con las hojas de la estevia producida a los pies de la Sierra de Tejeda y las aguas del deshielo de Sierra Nevada. Quien no tenga que conducir…¡que aproveche! (aunque siempre cabe la opción de comprarla y llevártela a casa).
Otras posibilidades para hacer turismo familiar en Alhama
Hay más, muuuuuuchas más, por eso Alhama es un lugar al que volver una y otra vez.
Un paraíso cercano que merece ser disfrutado a pequeños sorbos y en diferentes épocas del año.
La mejor idea es contactar con la Oficina de turismo del Ayuntamiento, donde nos proporcionarán toda la información necesaria sobre todas las posibilidades que este pueblo lleno de encanto ofrece a las familias que se animan a visitarlo.
Y entre todas ellas, yo destacaría dos ideas:
Las fiestas populares
El Alhama hay mucha marcha, y muchas costumbres populares que perviven gracias a su singularidad y a ese carácter jameño que enamora a todos los que la visitan.
Entre ellas, hay una que no me pienso perder: el famosísimo Carnaval de Alhama, auténtico símbolo de su identidad cultural que está declarado como Fiesta de Interés Turístico en Andalucía. Durante días, murgas y compañas recorren las calles cantando coplas que hacen referencia a hechos destacados durante el año, ataviados con disfraces sencillos y las famosas máscaras o mascarones que cubren sus rostros.
Otras fiestas destacadas son la Feria de San Juan, la Feria Grande de Septiembre, la Fiesta del vino… Y si vas en Navidades…¡hay que visitar su famosísimo Belén Bíblico Monumental!, con representación de los principales monumentos de Alhama y su comarca.
El Balneario de Alhama
No he tenido aún oportunidad de conocerlo y disfrutarlo en familia, así que no os puedo ofrecer información de primera mano. Pero como nosotros somos muy de balneario, es probable que este año lo añada a mi ruta «especial relax», que me lleva cada temporada a pasar unos días en el de Zújar.
Atractivos desde luego no le faltan, entre ellos su indudable valor histórico y su piscina exterior, ideal para disfrutar en verano.
¿Necesitáis más motivos para daros una vuelta por Alhama?
¡Nos vemos en el Poniente granadino familias!
