Dentro de los planes de turismo familiar en Granada, Loja merece colocarse en un lugar muy destacado, ya que las propuestas que su Oficina de turismo ofrece a las familias son tan variadas como atractivas.
En esta ocasión, optamos por hacer turismo familiar y de naturaleza en uno de los anejos del municipio de Loja, Riofrío, uno de los grandes atractivos de la zona y muy conocido gracias a sus rutas, la actividad de sus piscifactorias y por supuesto, su importante oferta gastronómica y de restauración.
Aquí os dejamos un pequeño vídeo de nuestra experiencia y la información básica para quienes se animen a calzarse las botas y darse un paseo por esta zona del espléndido Poniente Granadino
Tabla de contenidos
Cómo llegar a Riofrío
El desplazamiento a Riofrío desde la capital es rápido (apenas 40-50 minutos en coche), cómodo y sencillo, ya que la localidad está perfectamente comunicada a través de la autovía A92 en dirección Málaga.
Ojo, para quien decida realizar la visita en fin de semana o festivo, conviene recordar que Riofrío es un enclave muuuuy turístico, y el aparcamiento puede resultar complicado si llegamos sobre mediodía.
Claro que si vas a realizar una ruta de senderismo y a aprovechar el día al máximo, lo ideal es estar allí para las 10:30 u 11:00. Así lo hicimos nosotros y no encontramos ningún problema a la hora de dejar los vehículos.
Ruta guiada hasta el Nacimiento
Si hay algo que define a Riofrío es el agua y la espléndida naturaleza que se desarrolla en torno al río que da nombre y vida a la localidad, y que ha marcado su historia a lo largo del tiempo.
Nosotros optamos por realizar la ruta de senderismo del Nacimiento de Riofrío, declarado Monumento Natural hace muy poquito gracias al denodado esfuerzo de los técnicos del Ayuntamiento y los vecinos de la localidad.
Aunque la ruta es sencilla y muy accesible para realizar con peques, nuestra recomendación es concertar una visita guiada a través de la Oficina de turismo del Ayuntamiento de Loja.
El precio es absolutamente simbólico (más aún si la realizamos en grupo y repartimos el gasto entre las familias) y contar con un guía que conoce y ama la zona, capaz de transmitir los valores ambientales e históricos del entorno, no tiene precio.
Sin lugar a dudas, nuestro guía Francisco López, Guarda del coto de pesca de Riofrío, resultó uno de los grandes descubrimientos de la jornada.
Todo un privilegio ser acompañados por alguien que ama su trabajo y a su localidad como este hombre: siempre amable, atento y presto a responder las preguntas que le realizábamos adultos y pequeños, consiguió que llevemos a Riofrío para siempre en el corazón ¡y que muchos estemos deseando aficionarnos a la pesca deportiva!
Un suave paseo nos lleva a descubrir y valorar la vegetación de ribera, las actividades económicas que se han desarrollado gracias al río a lo largo de la historia, los restos de molinos y otras construcciones, los saltos de agua y pozas que jalonan el recorrido…
¡Y a ver y dar de comer a los patos! ¿Qué tendrán los patos que consiguen que los peques se vuelvan locos con ellos?. Si hacéis la ruta no olvidéis llevar algo de pan, porque dar de comer a los patos y jugar con ellos hará las delicias de los niños y niñas (y de los mayores…, que es algo que engancha 😉
Visita a la piscifactoría (Caviar de Riofrío)
Tras la ruta de senderismo y antes de comer, planificamos la visita a la piscifactoría donde se produce el famosísimo Caviar de Riofrío.
¡Mucho más que recomendada!
La visita es guiada por personal de la empresa (es preciso contactar con ellos previamente) y os aseguro que resulta educativa y fascinante a partes iguales para toda la familia.
Nuestro guía, David Montalbán lo dio todo en un recorrido por la historia de la empresa, de origen navarro y asentada en Riofrío desde los años 60, explicándonos las características del esturión (¡un animal prehistórico absolutamente fascinante!) así como los métodos de cría que se utilizan para producir el preciadísimo caviar.
Conocer de primera mano las instalaciones y el funcionamiento de uno de los mayores acuicultores de esturión del mundo y el primero certificado como ecológico, y terminar la visita con una degustación…es una experiencia tan atractiva como accesible.
Si se desea, también se puede comprar el caviar en la tienda Gourmet de la empresa, donde se realiza la degustación, claro que eso ya depende del bolsillo de cada familia.
Desde luego, yo lo tengo muy claro, y si en alguna reunión en casa utilizo caviar en alguna comida, será auténtico y será de Riofrío. Un sabor tan delicado como sorprendente, para paladear en momentos especiales.
Los adultos disfrutamos la cata, pero casi ninguno de los peques se animó a probar el caviar, así que mi recomendación es que contratéis la degustación únicamente para los adultos.
Sales de allí con tus botas de montaña y las mismas pintas de excursionista, pero tras la cucharadita de caviar y la copa de cava, te sientes como Holly Golightly en Desayuno con diamantes mirando el escaparate de Tiffanys: pobre pero fashion 😉
Visita al Museo de la Pesca
Imprescindible la visita al Centro de Interpretación Ambiental de Riofrío, donde se encuentra el recién estrenado Museo de la Pesca, creado por el Club de pesca de la localidad.
Conocer y valorar el entorno es el paso previo a respetarlo y cuidarlo, así que la vista un Centro de Interpretación tiene mucho que ver con educar a nuestros hijos e hijas en el respeto al medio ambiente.
Absolutamente fascinante el Museo de la Pesca, donde volvimos a disfrutar de las explicaciones de Francisco López, el guarda de pesca que conoce como nadie todo lo que rodea al fascinante mundo de la pesca deportiva: los tipos de anzuelo, las moscas utilizadas y la evolución de un deporte tan atractivo como desconocido.
Además, tuvimos la oportunidad de asistir a una demostración de elaboración artesanal de moscas para pesca por parte de un talentoso joven del pueblo, que dejó boquiabiertos a todos los que participamos en la actividad.
¿Sabías que los pescadores deben replicar con moscas elaboradas de forma completamente artesanal los insectos que habitan justo en la zona en la que van a pescar para que los peces piquen?
Por cierto, conviene recordar que en la pesca deportiva, la captura se realiza sin muerte del pez, utilizando para ello anzuelos especiales.
Comer en Riofrío
Hay muchas y buenas opciones para comer en Riofrío.
Nosotros optamos por el Restaurante Rivera, donde pudimos disfrutar de un menú muy económico y correcto, bien atendidos y cómodos.
Pero hay muchas más opciones y os animamos a descubrirlas todas, en incluso algunos establecimientos, como el Mesón de Riofrío, que ofrecen atractivos turísticos añadidos, como el Museo ecuestre.
Los famosos roscos de Loja
Y después de comer…¡el cuerpo pide dulce!
Imposible marcharse de la zona sin acercarse a Loja para probar los famosísimos roscos en su obrador más antiguo, la Pastelería Santa Teresa (en la Plaza de la Constitución).
Un local lleno de encanto, de sabor y de tradición, y por supuesto, especializado en ese bocado delicado y delicioso que es el auténtico rosco de Loja. Y si, cuando lo pruebas, es muy probable que te des cuenta de que lo que conocías como «rosco de Loja» no es la delicatessen que estás degustando…
Obligatorio volver a casa con una buena muestra de roscos, bienmesabe o soplillos, para conservar durante un tiempo un dulcísimo recuerdo de un territorio que es una auténtica maravilla.
Queda pendiente repetir la visita a Loja para conocer algunos de los muchos atractivos turísticos que ofrece a través de interesantísimas visitas guiadas como la que realizamos en Riofrío, y por supuesto, seguir «pateando» el Poniente Granadino, una comarca llena de sorpresas, de las que también destacamos planes tan chulos como la Villa Romana de Salar, Montefrío o Alhama de Granada.
¡Nos vemos en el Poniente familias!
