Para todas las personas que aman la naturaleza y disfrutan del senderismo, la prevención y la seguridad es fundamental ¡más aún si lo hacemos con niños!
Llevar una equipación correcta es una de las claves para disfrutar del senderismo con peques, que en ella no falte un buen botiquín de primeros auxilios es capital y conocer las reglas básicas de actuación en caso de accidente, imprescindible.
Hoy me gustaría compartir algunas nociones básicas sobre primeros auxilios y cuestiones esenciales a tener en cuenta en caso de accidente. Porque nunca pasa nada, pero si pasa… ¡mejor estar preparados!
Tabla de contenidos
En caso de accidente: PAS
No soy una profesional de la salud, ni tengo conocimientos especializados sobre el tema. Por ese mismo motivo, creo que es fundamental conocer las reglas básicas sobre cómo actuar en caso de accidente si se da el caso.
Ya sabes, casi nunca pasa nada, pero si pasa, un pequeño accidente en el medio natural, puede causar ciertas complicaciones, sobre todo por la distancia al centro de salud u hospital más cercano.
Si tienes conocimientos básicos de primeros auxilios (has realizado un cursillo o similar), mejor que mejor. Es el tipo de conocimiento que todo el mundo debería tener.
Pero si no los tienes ¿qué hacer? ¿cómo actuar en caso de accidente? la respuesta viene dada por los expertos en forma de siglas: PAS.
Con vuestro permiso, me voy a permitir «tunear» la norma básica en caso de excursiones con niños, añadiendo una P al principio PPAS, ya que para mí la primer norma debe ser siempre la prevención.
Prevenir
Cuando hacemos rutas con peques, la dificultad suele ser baja, pero no eso no significa que la actividad esté exenta de riesgos. Ni siquiera salir al parque, con la bici o los patines lo están ¿verdad?
En cualquier caso, antes de elegir la ruta, infórmate bien sobre sus características y nivel de dificultad, para asegurarte de que está realmente indicada para tus peques.
Ten en cuenta su forma física, si están acostumbrados a andar o no, si se manejan bien en terrenos escarpados… Y por supuesto, no olvides llevar una buena equipación, adaptada a las características del terreno y la climatología de la zona.
Las aplicaciones para rutas, como Wikiloc, permiten añadir el nivel de dificultad a la descripción de la ruta, o incluso etiquetarlas como aptas para niños, carritos de bebé… Presta atención a los detalles.
Revisa no sólo la duración de la ruta, sino también el desnivel, el grado de dificultad etc.
Y si vas con una actividad guiada ¡confía en los profesionales! No dudes en contactar con ellos/as previamente para indicar que vas con peques, referir su edad y su preparación y plantearles cuantas preguntas consideres necesarias.
Conocer bien las características del grupo ayudará al guía de ruta a adaptar el recorrido y hacerlo perfectamente seguro.
En todo caso, aplica siempre la prudencia e incúlcasela a tus peques.
Ojo, prudencia no es sinónimo de miedo.
De hecho el miedo es realmente peligroso y genera multitud de caídas. Ser prudente es ser consciente del peligro y evitarlo, pero no tener miedo. El miedo es paralizante, genera inseguridad y puede derivar fácilmente en accidente.
Caminar por la montaña es algo así como conducir: debemos hacerlo con precaución y respetando las normas, pero sin miedo. ¿Cuántas veces no has visto a un conductor/a inseguro estar cerca de producir un accidente?
A la montaña, y a la naturaleza en general, no se le tiene miedo, se le tiene respeto.
Y por supuesto no olvides: llevar siempre agua en cantidad, proteger del sol, evitar las horas de más calor en verano, llevar en la mochila alimentos energéticos como frutos secos y llevar siempre un pequeño botiquín de emergencias.
Cuenta con un seguro
Cuando realizamos actividades de montaña con empresas profesionales, estas cuentan con un seguro de accidentes que cubre a los participantes en la actividad.
Si practicamos senderismo o deportes de montaña en general por nuestra cuenta, y lo hacemos con regularidad, contar con un seguro también es buena idea.
En estos casos, lo más recomendable es federarse y elegir el seguro más adaptado al tipo de actividad que practiquemos y al espacio en el que la desarrollemos.
Podemos federarnos para determinadas actividades, con un seguro que nos cubra a nivel autonómico, nacional o incluso internacional.
En caso de pertenecer a un club de senderismo o deportivo (nosotras estamos en Bicha), lo ideal es hacerlo a través del mismo, ya que las tarifas suelen ser mas económicas.
Los seguros de las federaciones de montañismo pueden tener una duración de 6 meses o un año y el precio para niños y niñas es más reducido que el de adultos.
Si vives en Andalucía, no dudes en dirigirte a la Federación Andaluza de Montañismo para que te faciliten toda la información.
Además, estar federado tiene muchas ventajas, como descuentos en refugios y albergues, acceso a actividades de formación etc.
Ahora sí, tras la prevención, llega la actuación. ¡Vamos con la norma PAS!
Proteger
Lo primero en caso de accidente es crear una zona segura. Tanto para la persona accidentada como para nosotros y el resto del grupo. Párate, revisa el entono, evita que otras personas puedan sufrir también un accidente.
Serenidad. Es lo más difícil, sobre todo en caso de que el accidentado sea un peque, pero es de capital importancia.
Si tú estás histérico/a, el niño se asustará aún más. Habla con él o ella, pregúntale por su estado, dale la confianza de que vais a solucionar el problema en caso de que sea leve de que la ayuda va a llegar (en caso de accidentes más graves).
Y sobre todo, dale la tranquilidad necesaria y la confianza en sí mismo/a para afrontar la situación con el menor dramatismo posible.
¿Sabes cuando un niño se cae en el parque y se levanta tranquilamente hasta que un poco más tarde ve llegar a su madre o a su padre corriendo muy asustado y gritando, y es entonces cuando se pone a llorar como si no hubiera un mañana? Pues eso.
Ahora que estamos tranquilos, vamos a valorar la situación. ¿Es algo leve o necesitaremos la ayuda de los servicios de emergencia?.
En el segundo caso, ¡vamos con la A!: Alertar.
Alertar
Prohibido terminantemente salir de ruta sin el teléfono móvil y sin indicar a otras personas el recorrido que vamos a hacer.
Además, revisa que la batería esté cargada. Por precaución, no está de mas llevar contigo una de esas pequeñas baterías portátiles que utilizamos en los viajes para recargar la batería del móvil. Pesan poco, son baratas y nos pueden sacar de un apuro en caso de accidente.
Llama al 112.
Si no tienes cobertura, deja a la persona accidentada con alguien y desplázate hasta conseguirla. Por este motivo suele decirse que el grupo mínimo seguro para realizar rutas es de tres personas. Si vas con niños, al menos dos de ellas deben ser siempre adultos.
Cuando llames al 112 te harán una serie de preguntas. Respira y responde a todas con tranquilidad y de la manera más precisa posible.
Confía. Al otro lado de la línea hay excelentes profesionales perfectamente formados para afrontar este tipo de situaciones.
Socorrer
Si el accidente ha sido menor y puedes socorrer por tí mismo/a al accidentado ¡te vas a alegrar infinito de llevar tu pequeño botiquín de montaña!
Ese pequeño botiquín de primeros auxilios para tus rutas de senderismo puede llevar:
- Tiritas
- Gasas estériles
- Esparadrapo de tela
- Clorhexidina
- Tiras de aproximación
- Suero fisiológico
- Manta térmica
- Analgésicos…
Y si la cosa tiene mala pinta, no tienes los conocimientos mínimos necesarios para socorrer a la persona accidentada y has avisado a los servicios de emergencia, limítate a seguir sus indicaciones, evitando agravar posibles lesiones.
Ten paciencia y recuerda que la ayuda va a llegar lo más pronto posible.
Tranquiliza al peque, dándole cariño y apoyo.
Me consta que leer estas cosas da «miedín». Como madre, a mí también me lo da el escribirlas. Pero recuerda que cuando vamos con peques, si hemos hecho bien nuestro trabajo, hemos analizado la ruta, vamos preparados… la posibilidad de que se produzca un accidente grave es pequeña.
Seguramente sea mucho más peligroso el parque del barrio o el patio del colegio que la ruta de senderismo que has elegido.
Sencillamente, como para cualquier otra cosa, aplica el sentido común y disfruta del placer del senderismo en familia.
